Es indispensable adoptar conductas cotidianas, simples y sistemáticas para prevenir enfermarnos. Las medidas preventivas más eficaces son:
• Tapar con nuestro antebrazo la boca y nariz, ante de toser o estornudar,
• Evitar compartir utensilios con personas que padecen Influenza,
• No automedicarse y acudir a una consulta de inmediato,
• En lo posible, limitar la asistencia a lugares públicos,
• Ventilar los espacios cerrados y hogares, habitaciones o áreas de trabajo,
• Higienizar las superficies -mesas, sillas, controles remotos, pisos, etc.- con agua, detergente y jabón o lavandina,
• Limpiar las manos con alcohol reducido al 70 por ciento o alcohol en gel,
• Lavarse las manos frecuentemente, sobre todo antes de cocinar, luego de usar teléfonos, computadoras o dinero y al manipular desechos.
• No fumar en espacios cerrados y evitar hacerlo durante el invierno.
Síntomas de Gripe
Debe quedar en claro que, ante cualquiera de las siguientes manifestaciones, los pacientes deben consultar con las autoridades de sanidad a la brevedad:
• Fiebre superior a 38 grados,
• Tos, estornudos y congestión nasal,
• Decaimiento general, que puede manifestar también dolor de cabeza, garganta y musculares,
• Somnolencia e irritabilidad,
• Diarreas, vómitos y falta de apetito.
Cuando la enfermedad avanzó, se suelen presentar síntomas de:
• Dificultad para respirar o sensación de falta de aire,
• Respiración más acelerada,
• Dolor en el tórax,
• Alteraciones en el color de piel y labios,
• Mareos o estados de semi-conciencia y
• Empeoramiento repentino de la salud.
Usualmente, los síntomas gripales suelen aparecer a las 48 horas de efectuado el contagio y la mayoría de los afectados se recuperan en una o dos semanas sin necesidad de recibir tratamiento médico.