La Cámara de Apelaciones de San Martín decidió por unanimidad liberar a Paola Elvira Córdoba, la mujer que asesinó a su esposo de 185 puñaladas el pasado 9 de marzo en la localidad bonaerense de José C. Paz. Su hija, Paula Milagros Naiaretti, de 18 años, fue liberada el jueves último.
Los jueces Carlos Hermelo, Javier Mariani y Patricia Toscano concedieron la «excarcelación extraordinaria» que le había otorgado el Juzgado de Garantías y a la que la fiscalía se había opuesto.
El fallo, que consta de 12 páginas y se redactó tras una audiencia personal entre Córdoba y los miembros de la Sala I de la Cámara de Apelaciones de San Martín, apunta que «no solo la imputada Córdoba se encontraba sometida a una sistemática violencia de toda índole por parte de su esposo sino que todo el grupo familiar padecía la irascibilidad de la víctima de estos actuados».
El voto expresado por Hermelo y al que adhirieron sus pares también destaca las medidas dispuestas por el juez Alberto Brizuela que decidió «imponerle obligaciones especiales a la causante consistentes en no salir del domicilio durante los primeros treinta días (…) lo que posibilitará que en dicho lapso el Ministerio Público logre en avanzar con la investigación sin riesgo alguno de que su labor sea entorpecida».
Otra de las razones que motivó lo resuelto es que «desde el inicio de estas actuaciones se ha verificado que la encartada no ofreció resistencia alguna a su aprehensión» y cuestionó que el «hecho de demorar horas en comunicarse con el sistema 911 pueda ser tomado como una pauta de riesgo dada la posibilidad de modificar la escena del crimen».
«Córdoba fue muy clara al sostener que refirió a su hija que no llamaría a una ambulancia porque no quería que lo reanimen a Naiaretti, que tenía miedo de que éste se levantara y agrediera a toda la familia», añadió.
Finalmente, el magistrado remarcó «la buena impresión personal que Paola» le causó en la audiencia de conocimiento con el Tribunal: «Me ha quedado evidenciada una vez más el alto grado de afectación de la violencia padecida durante largos años por parte de la víctima de autos», concluyó.
